La terapia de apoplejía recoveriX condujo a rápidas mejoras funcionales tras conseguir eliminar la espasticidad en las primeras 17 sesiones en un paciente con apoplejía crónica. En esta entrevista, Christoph Guger explica los impresionantes resultados de un paciente, el Sr. Brandstetter, que mejoró de forma espectacular y rápida, a pesar de no haber visto ninguna mejora funcional en las primeras 17 sesiones de recoveriX.

Recientemente, se produjo un caso interesante en el que un paciente no mostró mejoras motoras en las primeras 17 sesiones. ¿Qué ocurrió?

Christoph Guger: Este hombre de 53 años sufrió un derrame cerebral 11 meses antes de empezar la rehabilitación motora recoveriX en el gimnasio recoveriX de Schiedlberg (Austria). Vivía con una hemiplejia en el lado derecho debido al ictus. Se sometió a 25 sesiones de entrenamiento recoveriX, durante las cuales se le pidió que imaginara el movimiento de la mano izquierda o derecha (imaginería motora). Durante las primeras 17 sesiones de entrenamiento recoveriX, no fue capaz de realizar la prueba de la clavija de 9 agujeros. La prueba de la clavija de 9 agujeros es una prueba común de la función motora en la que el paciente tiene que poner 9 palitos en determinadas posiciones con la mano izquierda y también con la derecha. Para cada mano se mide el tiempo. En la sesión 18, pudo completar la prueba por primera vez, y necesitó 10:22 minutos. Es un tiempo muy largo, pero también muestra que estaba realmente motivado para hacerlo. También muestra que el paciente no se rindió a pesar de la falta de mejora visible de la función motora al principio.

¿Por qué no se produjo esta mejora antes?

Christoph Guger: Este paciente tenía temblor y espasticidad en la mano derecha afectada. Necesitábamos las primeras 17 sesiones para reducir la espasticidad y el temblor. Después, sus habilidades motoras mejoraron muy rápidamente. Hemos visto este fenómeno con otros pacientes: Primero, los pacientes se deshacen de la espasticidad y el temblor, y sólo entonces las funciones motoras empiezan a mejorar.

¿Cómo midieron la reducción del temblor y la espasticidad?

Christoph Guger: Utilizamos la escala de temblores de Fahn, en la que los pacientes tienen que dibujar líneas y círculos. Se utiliza para evaluar el temblor. También utilizamos la escala de Ashworth modificada para la mano y la muñeca para evaluar la espasticidad. Ambas pruebas mostraron una mejora gracias al entrenamiento de recoveriX.

¿Cómo se sabe si un paciente mejora en sus actividades cotidianas?

Christoph Guger: Utilizamos el índice de Barthel (BI) para evaluar la capacidad de cada sujeto para realizar las actividades cotidianas. Esta puntuación evalúa la independencia de cada sujeto a la hora de alimentarse, bañarse, asearse, vestirse, ir al baño y su movilidad. El terapeuta pregunta al sujeto cómo realiza estas actividades: si es totalmente dependiente y necesita ayuda, si necesita una ayuda moderada o si es totalmente independiente. La mejora de la puntuación del índice BI del sujeto indica una mayor independencia tras el entrenamiento de recoveriX.

Se utiliza la escala de Fugl-Meyer para describir las mejoras motoras. ¿Cuál era el estado del paciente según la escala de Fugl-Meyer?

Christoph Guger: La escala de Fugl-Meyer se ha utilizado para evaluar las extremidades superiores e inferiores. Nos centramos en la extremidad superior del paciente. Empezó con 25 puntos de 66 (el máximo). Tras 25 sesiones de entrenamiento, el paciente alcanzó 46 puntos, lo que supone una mejora de 21 puntos. Cada sesión de recoveriX dura 40 minutos, por lo que el entrenamiento del paciente duró 16 horas en total. Se trata de una mejora enorme y espectacular tras sólo 16 horas de entrenamiento. Además, el paciente se encontraba en estado crónico 11 meses después del ictus. En este punto, los pacientes suelen dejar de mejorar con las terapias físicas estándar.

¿Qué significa realmente una mejora de 21 puntos? ¿Cómo se puede evaluar?

Christoph Guger: Grabamos vídeos de nuestros pacientes mientras se realizan las pruebas. Una mejora de 21 puntos significa que el paciente podía girar la mano derecha unos 90 grados antes del tratamiento y 180 grados después de recoveriX. Antes del tratamiento, el paciente podía levantar la mano derecha y tocarse la nariz, pero el movimiento era lento y poco fluido.

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¿Qué ha visto en la precisión del BCI para este paciente?

Christoph Guger: El paciente empezó con una precisión de alrededor del 65 %, y luego el rendimiento aumentó rápidamente. En la sesión 7, era casi del 100 %. Su precisión en la mayoría de las sesiones posteriores fue superior al 95 %, e incluso alcanzó un rendimiento del 100 % en algunas sesiones de recoveriX. También hicimos un estudio con controles sanos, y nuestra precisión media para ellos es de alrededor del 80 %. Esto significa que el paciente lo hizo mucho mejor que la mayoría de las personas sanas. Esto puede explicarse por la alta motivación de los pacientes y también por nuestro enfoque único en recoveriX, que combina la imaginería motora del paciente con la retroalimentación del avatar y la estimulación funcional con electrodos de los músculos que producen el movimiento y la sensación. Además, todos nuestros pacientes están ansiosos por alcanzar el 100% de precisión en cada una de las sesiones de recoveriX. Los pacientes incluso se enfadan si no lo alcanzan.

¿Qué mejoras se observaron en los datos del EEG?

Christoph Guger: Calculamos los llamados mapas ERD, que muestran la activación del córtex sensoriomotor izquierdo y derecho. Debido al entrenamiento de recoveriX, pudimos ver mucha más activación cuando el entrenamiento de recoveriX terminó. Esto nos muestra que el cerebro se estaba adaptando y reaprendiendo a moverse a lo largo de las 5.000 repeticiones de la tarea de movimiento en 25 sesiones.

¿Ha mencionado que está realizando una estimulación eléctrica funcional? ¿Puede explicar en qué consiste?

Christoph Guger: Colocamos electrodos de estimulación recoveriX en la piel justo sobre los músculos responsables de levantar la mano derecha y la izquierda. A continuación, aplicamos una corriente eléctrica de pequeña magnitud para que los dedos y la mano se levanten completamente durante la estimulación. Esto se llama dorsiflexión. Esto tiene 3 efectos muy importantes: (i) la mano paralizada empieza a moverse de nuevo, algo que gusta mucho a los pacientes, (ii) la espasticidad muscular se reduce porque los músculos se activan, y (iii) el paciente siente que la mano se mueve, lo que activa el córtex sensoriomotor. Durante la estimulación, es importante no aplicar demasiada corriente porque podría doler, pero el dispositivo tiene varias medidas de seguridad para controlar la corriente. Los pacientes afirman que es agradable cuando se estimula la mano y, por supuesto, cuando se mueve. Cuando se evaluaron sus funciones motrices con la Evaluación Fugl-Meyer tras completar la terapia recoveriX, el terapeuta informó de una mejora de 46 puntos en total.